¿Entonces era a eso a lo que te referías
con inestabilidad?
No maldigo a la noche, porque hizo que
te quedaras conmigo.
Maldigo a la mañana, que hizo que te sintieras culpable contigo.
Maldigo a la mañana, que hizo que te sintieras culpable contigo.
Estaré aquí esperando por tu voz
Aunque me culpes a diario
Por haber vuelto a buscarte,
Porque no quieres verte más reflejado en
mí.
Hay un sonido en mis ojos
Y esos me recuerdan a ti
Como el azulejo de los tuyos color café.
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