"Sabía que no vendrías" me dije después de nunca haberte visto volver, entonces termine por dejar de creer en la magia por su causa, Quizás yo no debí enamorarme de usted... Aquella noche te odie y te lo dije susurrando mientras tu simulabas dormir y yo disimulaba que no te creía. Razonando: yo no te necesito a mi lado yo te prefiero a diario pero a veces todo lo mio no te es suficiente ¿En que momento te volviste ladrón de mi tiempo secuestrador de mis deseos y dueño de mi cordura? Delirando: si tu ríes yo comienzo a amar el egoísmo de tu voz. Póngase un momento en mi lugar.
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Lo que tienes de mí
Te daré de mí: los amaneceres cargados de poca luz que enjaulaste, Un espacio naufragado que se queja porque ya no estas, El minutero del tiempo que se desespera al ver el mismo tiempo pasar. Te daré de mí: Las sombras que dejaste, La lúgubre manía que se arrastra desesperanzada y la arritmia de nuestras palabras manipuladas. Te daré de mí: Todo lo que tengo y de lo que invento también. ¿Y el corazón que robaste? También te doy el espacio sobrante. Entonces; Se abortarán en simultáneo los recuerdos de lo que fuimos, de lo que nunca llegamos a ser y de lo que nunca pudimos dejar de ser. Yo también te no-odio en silencio.